el pasado domingo 30 el periódico El Norte dio cuenta de una nota en la que mencionaba un festejo que el capo líder del Cartel del Golfo (preso desde hace varios años en La Palma) realizó a los niños de Reynosa. 22 mil personas asistieron al festejo amenizado por los Payasónicos, en el que se rifaron bicicletas y al término les entregaron 18 mil juguetes con una tarjeta que decía "La constancia, disciplina y esfuerzo son la base del éxito, sigue estudiando para seas un gran ejemplo; Feliz día del niño" Firmaba Osiel Cárdenas Guillen. Esta no es la primera vez que lo hace, al parecer lo ha hecho por 4 años seguidos aunque no de manera tan abierta.
Hace algun tiempo Osiel envio despensas de ayuda a familias afectadas por lluvias en Coahuila. http://www.frontera.info/buscar/traernotanew.asp?NumNota=302993 Y siempre que se ha necesitado los miembros del Cartel del golfo mejor conocidos como los Zetas, han prestado auxilio a las comunidades sobre todo fronterizas.
la verdad existe una gran fascinación por este personajes y por quienes lo integran. Solamente quienes viven en la frontera pueden entender este fenómeno. La realidad es que el narcotráfico ha estado tan infiltrado en todas las esferas de la vida social y económica del estado, a tal grado que parecería que el potencial de estos pueblos fronterizos algunos tan pequeños pero con un crecimiento económico bastante importante depende totalmente de ellos. Cuando llego el operativo México seguro, las personas se molestaban porque el dinero dejaba de circular. Hubo hasta intento de manifestaciones para solicitar que se detuviera el operativo.
Estos personajes son los héroes de estos pueblos, me impresionó ver a los niños en la TV agradeciéndole a Osiel el haberles dado esos juguetes. Este es un Robin hood moderno que trasgrede la ley, mata al por mayor pero que nunca olvida a su gente. La percepción del malechor bueno, que parece contradictoria pero que no es más que el sentir de una sociedad, que cansada de estructuras gubernamentales incapaces en todos los niveles, buscan admirar a quienes siempre estan dispuestos ayudar obteniedo sus recursos burlando a la ley.
El rumor que se dice siempre que cuando les preguntas a los niños que quieren ser de grandes diran "narcotraficantes" es cierto. La ostenticidad, el poder inmedible que dan las armas y el miedo, el gasto excesivo.... quien no los quisiera. En una sociedad sumaente injusta que díficl resulta no admirarlos
1 comentario:
Vaya una pequeña anécdota que me platicaron.
Un amigo se encontraba comiendo en un restarante de cierta ciudad fronteriza (me parece que Reynosa). De repente, les fueron recogidos celulares, Palms, beepers y cuanto dispositivo de comunicacion tenían, se cerraron las puertas del local y les instaron a los comensales que continuaran disfrutando sus alimentos. Nadie entró y nadie salió del lugar. Después de un rato, un hombre se levantó de su lugar y se dirigió a los presentes: "Gracias por acompañarme a comer. La cuenta está pagada". Era Osiel Cárdenas. Después de su salida, se les devolvieron los aparatos a todos los presentes.
Sí, la presencia del narco es cotidiana y omnipresente en nuestras ciudades de frontera. Sí, ser nacotraficante es una opción de vida viable para los jóvenes y niños que de otra forma no tendrían posibilidades de "exito". Sí, es terrible, pero el narco es parte del sistema. No es un cambio de partido lo que hará el cambio (PRI, PAN, PRD, whatever). Como diría la Reguillo: "Político, policía y narco son como la santísima trinidad; tres personas en una". Así que, ni pa dónde hacerse. Cómete tu enchiladas y agradece que no tengas que pagar la cuenta.
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